Cuando no se sabe como mejorar un smartphone, se hace más grande y listo. Eso es lo que deben pensar algunas marcas cuando preparan su remesa de modelos para una nueva temporada, porque salvo el claro cambio de tamaños, muchas veces no encontramos ese punto distintivo que nos hace decidir entre unos modelos y otros. Esto ha llegado hasta el extremo de crear toda una nueva categoría: el Phablet.
Hay compañías que inteligentemente están apostando por la fotografía, otras por transformar a los dispositivos en sumergibles, y más o menos entre todas, van aportando nuevos tamaños para los smartphones. ¿Y es que nadie piensa en nuestros bolsillos?. Se hace incomodo ese bulto rectangular en el pantalón, y eso si es que cabe. Yo siempre hablo que ahora según el smartphone que queremos llevar, hay que comprar pantalones especiales.
Dicen que hay mercado, que hay gente que le gusta una pantalla grande. Eso es indudable, pero creo que hay un salto entre usar una pantalla táctil grande y que esa pantalla la lleves siempre contigo porque es tu móvil. Ver a alguien hablando con una pantalla mayor que su cara, es esperpéntico cuanto menos. Y lo último, ha sido ver gente que sale a correr con una phablet atada a su brazo, una pantalla que prácticamente te hace de foco en la oscuridad.
Si alguien destaca especialmente en la categoría Phablet, ese es Samsung. Ignorando los tamaños más pequeños, hablamos de al menos 8 Phablets en poco más de dos años. Y eso apartando productos de pantallas aun mayores, que son mini-tablets con funciones de teléfono (Algo que considero lo mismo a un Phablet, la verdad). A cada smartphone que lanza, parece que sigue una competición de “yo la tengo más grande”, y ya ver más tamaño en las pantallas no nos coge de sorpresa.
Veo el mercado muy loco, experimentando con muchos tamaños, cuando deberían centrarse en cuestiones más importantes, como mejorar la batería de nuestros dispositivos sin hacerlo más grande. Eso, junto a la mejora de las cámaras, es el mejor camino y es algo que deberían hacer.
Al menos los smartphones son cada vez más finos, eso ayuda aunque las pantallas sean más grandes. Para mi el máximo son 5 pulgadas, el resto ya debería de considerarse tablet por muy híbrido que sea.
Muy de acuerdo contigo con el tema de las baterías, pero es la principal razón por la que se cambia de terminal, por lo que no les compensa.
Claro, es que es un negocio y tienen que vender más. Pero que mejoren las baterías y que duren 3 días cargadas con uso normal, tampoco sería una locura. E igualmente, podrían mantener el “consumismo habitual”.
Con respecto al tamaño, las 4,2″ que tiene el Samsung Galaxy SII sigue siendo mi media optima. Las 5″ como dices, las costumbre a verlos ya hace verlos más normales, pero se me hace aun muy grande
Totalmente de acuerdo, no entiendo esa moda de querer móviles cada vez más grandes. Y además de no caber en el pantalón añadiría más desventajas como la pérdida de intimidad (los demás pueden ver sin dificultad lo que haces con el smartphone) y mayor riesgo de rotura de la pantalla (no quiero imaginar cómo puede sonar eso cayendo en plena calle xD). ¿El tamaño perfecto para un smartphone? 4,5″. También habría que hacer un análisis de mercado sobre hombres y mujeres por aquello de que ellas generalmente sí pueden transportar su phablet en un bolso. ¿Puede ser un aliciente para que todos usemos determinadas carteras o bandoleras?
No claro, tal y como han llegado se ha visto que hay un mercado que les interesa, sobretodo en el ámbito laboral. Se de gente que tiene que ir de un lado a otro tiene que tener la oficina como quien dice en el bolsillo. Para ellos es muy practico tener un smartphone con pantalla grande para leer y escribir documentos.
Sobre análisis de mercado para hombres y mujeres, pues también tienes razón. Seguramente a las mujeres que tienen más facilidad de transportarlos, les interese los smartphone de pantalla grande. Pero aun así, el tema de los gustos siempre esta presente.
Gracias por el comentario